A Camilo Ernesto y su mirada picara.
Después
de mucho tiempo de activismo tanto en el trabajo de promoción social y en las
prácticas curriculares de la carrera, pensamos hacer un alto para poder reflexionar
sobre nuestra carrera profesional. En el último numero de la revista Voces de
Trabajo Social llamamos la atención sobre la redefinición de nuestra carrera y
se planteaba cambiar el nombre de nuestra carrera por la Políticas Sociales
porque el contenido de la malla curricular esta basado en cursos teóricos y
metodológicos mayoritariamente de Políticas Sociales, Políticas Publicas, etc.
En
esta oportunidad quisiéramos remarcar ya no solo en los nombres y contenidos de
los cursos sino sobre todo en la
desarticulación que tiene el profesional de Trabajo Social en su ejercicio profesional del contexto
donde se mueve o desconoce la dinámica social que va cambiando por no contar
con elementos teóricos que permiten dar cuenta de los espacios donde se ubica
nuestra carrera.
1.- SOLO CON LOS INSTRUMENTOS
NO SE CAMBIA LA REALIDAD.-
En
una reunión de profesionales de las ciencias sociales se intentaba cuestionar
que no solo los cursos de aplicabilidad
de las políticas sociales serviría para el cambio de actitud de las personas en
otras palabras para el cambio de mentalidad de la población, sino se debe dar
importancia a los cursos teóricos de la ciencias sociales, de las políticas
sociales, temas actuales que permitirían comprender el contexto social, político,
cultural y económico de la nación, región, localidad, etc.
En
estos últimos años los cambios que se han desarrollado no solo en Trabajo
Social sino en las Ciencias Sociales han sido radicales en términos metodológicos
porque se han desechado las Utopías y
las teorías totalizadoras (por ejemplo el marxismo) de las curriculas de
estudios y se ha dado preferencia a los instrumentos (árboles de problemas,
marco lógicos, silabus por competencias, gestión social, marketing social,
eficiencia, eficacia, etc., etc.) pensando que los cambios de actitud de los
pobladores de lo asistencial a lo promocional esta basado en la ejecución de
instrumentos sociales.
Por
tanto los estudiantes y profesionales van formándose en personas ejecutoras (instrumentalistas)
de políticas sociales, sin tener en cuenta el contexto social donde se encuentra la institución donde
trabaja, muchos de nosotros más nos interesa como debemos aplicar el
instrumento, evaluar la aplicabilidad del instrumento, seguir los pasos que
tiene que cumplir el instrumento, etc. Esto no solo se da en los cursos de
políticas sociales sino también en el campo de la investigación porque más nos interesa la matriz de
consistencia que los resultados obtenidos de la investigación, en muchos casos
no dan
importancia al marco teórico, estado de la cuestión del tema que esta
investigando.
Creemos
que las instituciones del Estado, las Empresas, las Organizaciones de Base han
cambiado sus formas de trabajo para hacerlo exitoso la mayoría han desarrollado
su Planificación Estratégica, sobre ello vienen desarrollando sus proyectos
sociales o proyectos de inversión, hasta ahí todo es correcto. Los
profesionales y los trabajadores de una Institución en muchos casos son
capacitados o han participado en la elaboración del Plan Estratégico, toman
mecánicamente el instrumento y quieren desarrollar tanto en su oficina de
trabajo o en el área de trabajo su propio planificación estratégica por tanto
se construyen un sin numero de visiones, misiones, objetivos estratégicos,
valores compartidos y de esta forma se pierden las propuestas coherentes tanto
teóricas y practicas.
Para
muestra un botón a la camisa, en la Universidad Nacional del Centro del Perú,
podemos encontrar un sin numero de Visiones y Misiones primero de la
Institución, seguido de sus Facultades, Direcciones Universitarias, etc. Etc.
Nuestras preguntas son: ¿La Institución debe contar solo con una Planificación
Estratégica?, ¿La Institución debe tener solo una Visión y Misión?, ¿Quiénes
debe trabajar para el cumplimiento de la Visión y Objetivos Estratégicos todos
o solo las autoridades?, estos y muchas preguntas están sin respuesta debido ha
la utilización en forma mecánica el instrumento con la idea si no elaboramos
nuestra planificación estratégica nuestro trabajo va ser deficiente por lo
tanto todos los que asumen un cargo
comienzan de cero y todo lo que se hizo no tienen nada de bueno.
Este
ejemplo nos pude llamar la atención en nuestro trabajo como docentes,
profesionales, alumnos y pobladores porque estamos perdiendo de vista en primer
lugar nuestro referente en otras palabras no se tiene una Utopía basado en la calidad humana nos estamos convirtiendo en mero activistas u
operadores de los instrumentos en forma
mecánica. Segundo lugar vamos desechando los aparatos teóricos de Trabajo
Social y de las Ciencias Sociales por lo que nuestra intervención es
pragmática. No estamos en contra de los nuevos paradigmas instrumentales sino
al contrario debemos utilizarlo en forma conjunta con la otra parte teórica y
saber conjugar los dos en la búsqueda del cambio de actitud de las personas.
En
nuestra carrera nosotros entendemos como prácticas pre-profesionales y
profesionales como un proceso dinámico de socializar y poner en acción todos
los cursos aprendido tanto los teóricos y los metodológicos para poder
contrastar la valía o lo pertinente en el ejercicio profesional de lo cual permitirá ratificar, adecuar,
redefinir conceptos y procedimientos según el contexto laboral.
En
estos últimos años podemos ver el sistema de prácticas de Trabajo Social esta
estructurado en forma instrumental en
otras palabras según el proceso de la Gestión Social: Investigación Operativa,
Diagnostico, Planificación Estratégica, Proyectos Sociales, Monitoreo y Evaluación
sin tener en cuenta el proceso de
reflexión teórica y en muchos casos nos interesa que aprenda el proceso y no la
reflexión.
El
proceso de evaluación a nuestro entender todavía parcial del sistema de
prácticas que desarrollaron los docentes de la Facultad en estos últimos días se pudo constatar que
la totalidad de los niveles de prácticas no esta incluido en el Silabus como
una Unidad o línea trasversal la reflexión teórica que puede permitir al alumno
tener una visión completa de la realidad donde esta desarrollando su práctica.
Esto
nos conlleva a desarrollar una reflexión
en cuanto a la evaluación de los alumnos en nuestro silabus de competencia esta
señalado, la evaluación de los alumnos se debe tener en cuenta tres procesos:
Cognitivo, Procedimental, Actitudinal si esto es así nuestra pregunta es ¿como
medimos el conocimiento? si todo el proceso de las practicas profesionales es instrumental, nuestra respuesta es obvia se
esta dando peso en la evaluación el procedimental en otras palabras el proceso
instrumental no se quiere decir que esta mal sino que es incompleto la
evaluación si falta uno de los procesos ya que lo actitudinal se pude comprobar
en todo el desarrollo de la práctica y en la interrelación con su población
beneficiaria.
Estos
nos permite plantear una propuesta de reestructurar el sistema de prácticas
para ello lo primero debemos cambiar ser nuestras estructuras mentales y
nuestros hábitos de lectura tanto docentes y alumnos dando prioridad a la
reflexión teórica en forma equitativa al
proceso instrumental, Segundo que el proceso de prácticas debe ser por sectores
de intervención profesional donde el alumno debe ejercitar todo lo aprendido en
las aulas universitarias en su
interrelación con las instituciones o personas.
Podemos
llegar a la conclusión la compleja interacción de las personas del uno al otro no
pude ser visto solo con un lente sino
con los dos porque lo instrumental debe estar acompañado de la reflexión
teórica en otras palabras no solo con lo
instrumental podemos cambia las actitudes de la personas en su vida cotidiana.
2.- LA REFLEXIÓN TEORICA UN
VACIO EN NUESTRA FORMACIÓN PROFESIONAL.-
En
una de las clases que tuvimos con alumnos de Trabajo Social pudimos percibir
que la reflexión teórica no era de importancia según ellos manifestaron para
los docentes mas le interesa el proceso de aplicación, pero esto no es solo en
los alumnos sino también en los docentes en el año 2003 se aplico una encuesta
las preguntan centrales eran ¿Que libro estaba leyendo?, ¿Con qué teoría
desarrollaba su curso?, pudimos encontrar como respuesta un porcentaje
considerado había leído el libro “Quien se llevo mi queso”, otros
“Planificación Estratégica y su
aplicabilidad” , la segunda respuesta
señalo la mayoría como es operativo no
necesito ninguna teoría para el dictado de sus cursos. Solo con estas dos
respuesta podemos conjeturar que tanto alumnos y docentes no están dando
importancia no solo a los cursos teóricos sino sobre todo el habito de lectura
esta siendo muy débil sabiendo que es muy importante en nuestro quehacer
profesional tanto la lectura como la reflexión de caso contrario nos
convertimos en mero activistas u operadores de políticas sociales o políticas
institucionales sin tener una visión de conjunto.
Pero
no solo es en los cursos teóricos sino en las investigaciones podemos observar en las sustentaciones de
tesis para los jurados más les interesa la matriz de consistencia si han tenido
lógica o no en otras palabras la metodología muy pocos o escasos preguntan
sobre los resultados casi nadie sobre el marco teórico que ha servido en le
proceso de investigación.
Con
estos hechos podemos conjeturar la formación profesional de los Trabajadores
Social se ha ocultado o minimizado los cursos teóricos anteponiendo
mayoritariamente los cursos prácticos nosotros
nos preguntamos cuando dejaremos de ser una disciplina joven de las ciencias
sociales siempre estaremos en proceso de ser ciencia o solo somos una carrera
instrumental de las políticas sociales si es así no debemos tener vergüenza
sino al contrario valorar nuestra profesión.
Los
cambios dinámicos que van desarrollando en
la aldea global ha descolocado a las carreras de las ciencias sociales debido
ha su apego a los viejos paradigmas que no responden a los nuevos contextos es
urgente una redefinición de las ciencias sociales y principalmente del Trabajo
Social que permite construir nuevos referentes teóricos sobre todo latinoamericanos, los nuevos
conceptos teóricos que conocemos están basados en contexto de sociedades
virtuales, sociedades pos-modernas que muchos de ellos no se adecua a nuestras
realidades por lo que debemos construir conceptos teóricos propios.
En
el caso del Trabajo Social después de
los esfuerzos de algunos intelectuales brasileños, argentinos, chilenos y
colombianos en la década del sesenta y setenta que presentaron algunas teorías
sobre la carrera: Trabajo Social de
Caso, Trabajo Social de Grupo, Trabajo Social de Comunidad, Campos de
Intervención del Trabajo Social, Bienestar Social, entre otros. Los profesionales
que seguimos no hemos construido ni propuestos conceptos teórico, solo nos hemos
dedicado a cuestionar dichos conceptos señalando tradicionales u obsoletos, se
ha estado utilizando otros conceptos de las ciencias sociales o de otras
ciencias y adecuándolos a la coyuntura
del contexto y últimamente apertrechándonos en los procesos instrumentales.
Bien
interesantes es seguir el proceso que tuvo la revista Acción Crítica una de las
pocas revistas teóricas del Trabajo Social Latinoamericano los 13 primeros
números están basado en los concepto teóricos ya señalados, del 14 al 35 la
revista da un giro a los movimientos sociales como espacio de intervención del
Trabajo Social donde articula con temas de interés como Salud, Educación,
Educación Popular, Mujeres, Niños, en otras palabras centrándose en las
políticas sociales o políticas publicas y sus actores en los últimos números 36
al 39 se centra en este nuevo instrumento que removió el letargo teórico a los
trabajadores sociales la gerencia social como nuevo paradigma no solo del
Trabajo Social sino de las Ciencias Sociales y el 40 van planteando nuevos
escenarios para el Trabajo Social en este milenio.
Como
podemos observar desde hace mucho tiempo se ha dejado de reflexionar sobre la
teoría del Trabajo Social por lo que los
docentes y profesionales no tienen aparatos teóricos que permite abrir el
debate sobre la importancia que tiene el Trabajo Social o el Futuro que tiene
la carrera, nuestra persistencia en
abrir la discusión planteada anteriormente Trabajo Social o Políticas Sociales es
el debate que no se debe esperar sino vamos ha quedar fuera de la historia.
Quisiéramos terminar esta primera reflexión sobre
el laberinto del Trabajo Social señalando la importancia que tiene la otra cara
de la moneda la teoría por lo que proponemos en primer lugar motivar a los
alumnos y docentes a la reflexión teórica, segundo alentar a construir aparatos
teóricos sobre Trabajo Social y sobre
todo los alumnos deben desarrollar investigaciones sobre Trabajo Social no contamos con datos empíricos solo se tiene
conjeturas teóricas basados en ensayos o artículos y finalmente construir una
revista teóricas de la carrera como un espacios de reflexión, debate e
intercambio de experiencias.